Una vez que ya sabés lo que querés y que ya especificaste las características… es fundamental DEFINIR UNA MEDIDA. Si pedís clientes, decí cuántos, ¿tres, quince, siete millones? Voy a poner el clásico ejemplo del dinero, que es lo que más solicitan en estos tiempos, destacando que «mucho, algo, lo necesario o lo suficiente» NO SON MEDIDAS ESPECÍFICAS.
Medida en este caso, significa número o cantidad. Entonces ¿cuánto querés? Si aún pertenecés al grupo de los que no conoce bien las leyes de la magia del dinero o no estás acostumbrado a recibir varios miles en cuestión de minutos o días; empezá pidiendo una cifra baja para ir ganando práctica y después podés ir subiendo paulatinamente la suma cuando adquieras un poco más de experiencia en «El Arte de Manifestar.»
Con respecto a otras cuestiones que parecieran «no cuantificables» y aparentemente no podrías especificar un número concreto, como por ejemplo «independencia emocional», al menos determiná un porcentaje. El universo ya sabe la cantidad que te envía, pero es conveniente que lo sepas vos específicamente para poder verificar, diagnosticar y medir avances.
Si pedís *muchos clientes* y te llegan 10 mil juntos, tal vez no puedas atenderlos a todos… tampoco sabrás si te enviaron de más o de menos. Para saber si recibiste la cantidad exacta, es necesario especificar cuántos para poder medir el resultado.
Entonces, respecto de tu DESEO ESPECÍFICO…
♥ ¿Qué cantidad querés?
Contame en los comentarios y AGREGÁ ESTE DETALLE A TU DESEO EN TU LIBRETA. En el próximo artículo te comparto los detalles del cuarto componente: el tiempo.
Cariños y mucho brillo…
Fabiana 🙂
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